En Madrid, durante el descanso del partido de la NFL entre los Miami Dolphins y los Washington Commanders en el emblemático estadio Santiago Bernabéu, los escenarios musicales se encendieron con un espectáculo sin precedentes.

Los ganadores del Grammy Latino, el productor argentino Bizarrap y el ícono puertorriqueño Daddy Yankee, ofrecieron un show espectacular, pero la verdadera sorpresa y sensación del evento fue la histórica actuación de la banda hondureña 504, que compartió escenario con estos gigantes de la música.

Con su estilo inconfundible y una energía arrolladora, 504 conquistó al público internacional. Vestidos con su tradicional atuendo, los músicos hondureños brindaron una presentación que desató ovaciones y llenó las redes sociales de mensajes de orgullo y admiración por su talento, poniendo a Honduras en el centro de la escena musical global.

El espectáculo también incluyó el esperado estreno en vivo de “BZRP Music Sessions Vol. 0/66”, la colaboración entre Daddy Yankee y Bizarrap, acompañado de luces, fuegos artificiales y percusionistas que hicieron vibrar a miles de espectadores, muchos de los cuales capturaron cada instante con sus teléfonos. Bizarrap rindió homenaje a artistas con los que ha trabajado, como Shakira y Quevedo, mientras Daddy Yankee, tras casi dos años alejado de los escenarios, dedicó su regreso a sus fans y al arte de la música.

La megafonía del estadio completó la experiencia con una ecléctica selección de éxitos como “La bachata” de Manuel Turizo, “Berghain” de Rosalía, “Bamboleo” de Gipsy Kings y la icónica “La Macarena” de Los del Río, creando un ambiente electrizante y lleno de entusiasmo.

Este evento quedará marcado en la historia de los espectáculos internacionales, no solo por la brillantez de Bizarrap y Daddy Yankee, sino por el papel estelar de 504, que demostró que el talento hondureño puede brillar en los escenarios más grandes del mundo, dejando una huella imborrable de orgullo y pasión.